"Esta crisis pone de relieve la importancia de la salud"
¡La vida es sabrosa! Este es el lema de la chef pastelera Sandrine Baumann-Hautin. Nació en una familia de pasteleros franceses del departamento de Oise y sigue viviendo en su ciudad natal. "Creo en el poder de lo local". Ella nos comparte sus experiencias durante el primer año del coronavirus.
Los tiempos de incertidumbre requieren algo a lo que aferrarse. Rituales cotidianos como una charla en la panadería o un consuelo en forma de deliciosa pasta hacen nuestra vida más llevadera en esos momentos.
Sandrine Baumann-Hautin lo sabe muy bien. Después de acumular experiencia laboral en varios establecimientos de primer nivel en Francia (como el Maison Rostang) y de participar en concursos como el "Championnat de France du Desert", decidió convertirse en asesora. Ha trabajado, entre otros, para Cacao Barry en París. Tras especializarse en pastelería saludable ahora Sandrine también ofrece su experiencia al sector de la salud, incluso en departamentos de oncología.
Los consumidores se preocupan cada vez más por su salud. ¿Qué opinas a este respecto?
"Mis recetas están desarrolladas para favorecer la salud. Por ejemplo, ajusto el índice glucémico y evito el gluten cuando es necesario. Para hacerlo bien necesitamos intercambiar ideas con otras disciplinas. Es todo un reto, pero estoy convencida de que este es el futuro. Además, el elemento local siempre es importante. A fin de cuentas, también tiene que ver con la salud. Procuro trabajar siempre con entidades y productores locales."
"El año pasado fue un proceso de aprendizaje continuo. ¿Hasta qué punto te puedes adaptar? ¿Cómo puedes reinventarte a ti mismo/a o a tu oferta de productos? Fue muy interesante. Para mi fue también un momento para hacer balance. Doy prioridad a mi propia salud, con el fin de acumular energía para proyectos nuevos. Esta crisis volvió a poner de relieve la importancia de nuestra salud, lo cual me proporcionó un estímulo adicional para buscar una nueva dirección en el mundo de la pastelería, más centrada en el aspecto humano y de la salud. De ahí nacieron mis talleres de pastelería. Por ejemplo, visito el departamento de oncología de un hospital y ayudo a la gente a recuperar el amor por la vida. Este es mi lema: ¡La vida es sabrosa! Se trata de encontrar un equilibrio entre el azúcar y los sabores".
Porque está bien darse un gusto, ¿no?
"¡Por supuesto! Las creaciones de los chefs pasteleros y chocolateros proporcionan un dulce consuelo. El chocolate, en particular, es un buen producto para momentos de frustración. Los chocolateros estarán de acuerdo: actualmente apenas dan abasto con los pedidos. Y yo cada vez recibo más peticiones para utilizar chocolate en mis creaciones. Nuestros productos hacen algo por la gente".
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